miércoles, 30 de noviembre de 2016

A la manera de un decálogo

Primeras exploraciones
1.  No matar el proceso.  Esto muere si no ensayamos.
2.  No matar el proceso II.  En los ensayos somos indispensables todos. Aquí no hay roles principales porque pensamos en la obra como unidad.
3.  No matar el proceso III.  Los cuerpos requieren un training.  Cada quien aceitará su instrumento de trabajo.
4.  Confiar en el otro.  Será una creación colectiva.
5.  Cuidar los espacios.  No cerrar las puertas, y seguir explorando los lugares de ensayo.
6.  Liderazgo individual y colectivo.  Cada uno se hará cargo de un mes para convocar a ensayos y, llegado el momento, promover una función.
7.  Mover el proyecto.  Somos obra y proyecto.  Participaremos en las distintas convocatorias.
8.  Mover el proyecto II.  Gestionaremos viaje a Cuba.
9. Mover el proyecto III.  Mostraremos avances a Atilio, recibiremos su retroalimentación.
10. Trabajar en armonía.  Nuestros conflictos serán de orden creativo.  Reconocemos que somos un grupo de aficionados.  Sin embargo, lo que verdaderamente nos interesa es trabajar de manera armónica.
 

Nuestra muestra interna

Nos debemos al público y, seremos coherentes con el proceso.  Decidimos cancelar tanto la función como la muestra abierta para realizar a cambio dos pasadas generales de la obra, y percibir a fondo nuestros alcances y vacíos, sobretodo los vacíos.  Es importante que todos incorporemos en nuestra memoria corporal la obra como unidad.  Debemos hacerlo antes de que viaje Atilio.

Divergencia con Bosques sobre la realización de un registro visual del material de trabajo que llevamos, un video que funcione sólo como herramienta interna  del grupo para tener un bosquejo de lo que hemos marcado.  Bosques no está de acuerdo, al parecer es muy purista al respecto y dice que no está acostumbrada a esas formas de trabajo, pero los demás consideramos que es una tecnología que vendría bien para dejar una memoria interna del proceso.  En la contemporaneidad muchos grupos -tanto de teatro como de danza- acuden a estas ayudas.  Todos somos conscientes de que sería sólo un registro no el producto acabado ni mucho menos la obra de teatro que sólo se respira en las tablas.

miércoles, 23 de noviembre de 2016

Escenas de P y S.M

En el Museo una vez más pasamos las escenas de P. y S.M.   El ensayo de hoy bien pudo ser pasar estas escenas u otras,  no hay nada planificado,  así estamos.   Todo depende de quién llegue,  del espacio disponible y un gran etc.  Justo cuando todas las piezas tendrían que empezar a relacionarse y encajar, parecen soltarse, desligarse por completo.   Y sin embargo, queremos continuar con el sueño.  La vida es sueño sí señores -como diría Calderón-  pero, de pura ilusión no se materializa el teatro.

El monólogo de Fidelina

Atilio trabaja con Helga el monólogo de Fidelina.  En palabras de Helga:  "Atilio hizo y deshizo, fue un parto colectivo".

Esta semana fue de trabajo en parejas:  Helgay Walter.  Atilio y Bosques. 

Entre tanto seguimos mirando el vestuario y los objetos.  Falta mucho, falta todo pero aun no desistimos.

domingo, 13 de noviembre de 2016

Una página al azar...

Recuerdo vagamente en El Caballo Ciego:  el movimiento de alguien que hace parte de un colectivo afecta instantáneamente al otro, a todos.  Hoy abro casualmente el libro y encuentro:

"(...) La tragedia a la que aludía el espectáculo se expresaba con vitalidad salvaje y lirismo, con humor, sí, y con alegría. (...)  Hoy estamos frente al comienzo de un nuevo espectáculo .  Si pudiera expresar un deseo sería que todas las partes oscuras de nuestra experiencia y las heridas ocultas que alimentan nuestra llama interior puedan surgir de nuevo (...) con una ternura solar y sonriente".

Será esa ternura solar y sonriente la que nos permitirá continuar a pesar de las partes oscuras que llevamos dentro.

Conferencia y ensayo en el Peralta

Luego de la conferencia de Atilio Caballero:  "El teatro cubano hoy, identidad y memoria", ensayamos en el tablado del Peralta.

Calentamiento individual que más bien debería llamarse estiramiento individual y, luego marcación espacial y ensamble de cuadros.  Los dos últimos momentos de la obra dependerán de dos elementos. 

Claudia pregunta una obviedad que termina por aclarar entradas y salidas, la actitud que se ha de tener en los momentos off, cuando se es Helga, Diana, Dianis, Claudia y no P. F. S...

Del cansancio, la claridad y los últimos acuerdos del colectivo

Esta entrada resume tres días en los que hemos intentado ensayar pero,  el encuentro desvía hacia otros caminos, igualmente válidos,  necesarios.  El primero se resume en cansancio, agotamiento interior que cada quien resuelve como puede.  El segundo en horarios y espacios que se dilatan y, el tercero en la oportunidad de precisar compromisos del colectivo como la distribución de los recursos del primer proyecto con luz verde, la logística de la puesta y, el sostenimiento general.  Quizá  lo más importante sea la conclusión a la que llegamos:   la conciencia plena y compartida de estar en un proceso inacabado, la certeza de que todavía no hay obra y, la franqueza para decirlo, escucharlo y reconocerlo.  Eso sí, contamos con una estructura clara y una muy buena dramaturgia pero, falta todo el trabajo de actuación y dirección actoral que, ya vendrá.  Todo a su tiempo, en este caso a nuestro tiempo.

lunes, 7 de noviembre de 2016

domingo, 6 de noviembre de 2016

Regreso de Dianis

Hoy intentamos ensamblar los primeros momentos de la puesta.  Todo está crudo y no acaba de tomar forma pero, Atilio aprovecha para que Dianis observe lo que hay y se ubique en los momentos donde se integrará. 

Atilio le propone a Helga trabajar una mañana de la próxima semana en su monólogo.

El lunes festivo al parecer ensayaremos de 5 a 8 pm.  

Es indispensable tener todos los objetos y ubicarlos en sus respectivos lugares, así como los textos aprendidos.  (Algo evidente, no está demás recordarlo).

Ya nos han dado un lugar y día de presentación pero, la verdad es que en el momento en que estamos será la muestra de un proceso, no de una obra.


jueves, 3 de noviembre de 2016

Un teatro vivo.

Sin luz y en la terraza.  Casi una premonición para la escena a ciegas.  Cuadro II.  

Ejercicio de Peter Brook:  el arte de caminar por la cuerda floja.  Algo más que equilibrio.  Los pies deben expresar su inteligencia sensorial, son ellos los que guían, no es una cuestión de la razón o del intelecto, más bien de la conciencia de estar donde se está -afirma Atilio-.  (Helga, Bosques y Claudia intentan caminar por la cuerda floja, en ese orden).

Recuerda Atilio que a la manera de P. Brook debe propiciarse un teatro tan vivo que atrape al espectador y, para ello es preciso dar el salto de la representación a la presentación, estar plenamente es olvidar que se actúa para entregarse al momento vivo de la escena, y esa sensación se acaricia solo por instantes. 

Pasamos el cuadro II,  tres veces.   El papel del lazarillo -a la manera del Teatro No- es tan vital como el de los dos personajes que deben recorrer la cuerda floja.  Toda la escena la guía una metáfora, y es el móvil de P.,   salir de la oscuridad a la luz, un acto de fe.  S.M por su parte confía y es dichosa en esa entrega.


En el Peralta...

Atilio, Bosques y Claudia en el Coliseo Peralta.   Hermoso lugar, no cabe duda.

Exploramos el final del cuadro I con un repaso de acciones sólo gestual,  a partir de allí Atilio concluye que el final del cuadro I no requiere palabras.  Nos pide repetir la secuencia de acciones integrando algunos matices de actuación que parten de las intenciones que mueven a estos dos personajes. ¿Por dónde se mueve P, qué desea?, ¿Qué hace S.M?

Luego exploramos el cuadro IX en el que hay un contrapunto tanto en los tonos de voz como en el contraste de los tiempos, que siendo distintos ocurren en el mismo espacio.  -Muy importante aprenderse los textos-

Queda claro:  Si bien S. M  habla en el presente , este presente está distanciado del momento en que ocurrió el derrumbamiento, por eso dice el texto como lo dice.

Atilio trabaja con Claudia el monólogo 1 de S.M, lo modela como si fuera arcilla.  Acción, texto, acción texto, -sólo hasta que termine la acción viene el texto-, el monólogo tiene una dirección precisa, un foco preciso -así varíe por momentos-.   Respecto a la intención, es una suerte de secreto a voces, de intimidad confesada.  Hay que hallar la velocidad requerida, la pausa... sobretodo las pausas.  Un ritmo que debe encontrarse y comunicarse.    Por eso,   "tómese el tiempo". 


miércoles, 2 de noviembre de 2016

Ritual de Tres

Somos tres las mujeres que hoy nos reunimos porque los cambios intempestivos de horarios y de espacios han hecho que trastoquemos hasta los encuentros.  Hoy asistimos a un ritual de tres, tres tintos, tres voces en tono de mujer, tres vidas, tres sueños de tres.

Nos dimos tiempo,  primero para escucharnos, luego para reconocer nuestros cuerpos y volver a llamarlos.   El tiempo del teatro es sagrado -por poco o mucho que podamos dedicarle, es "aquí y ahora"-.  Lo intentamos, y decidimos trabajar sin Atilio.  Prueba de fuego.  Muy importante sentir su ausencia, pues nos da una nueva dimensión al concluir que este esfuerzo no puede morir cuando él se vaya.  Todo lo contrario, es ahí cuando dependerá completamente de nosotras.  ¿Le vamos a seguir apostando a esto?  SI.